El Gran Premio de Monza tuvo algunos percances que hizo sufrir mucho a los pilotos. Este percance fue la lluvia extrema, que además de complicar la conducción a los pilotos, hizo que hubiera variedad estratégica en la carrera o eso parecía. Sobre la mitad de la carrera, llegaba la hora de parada, unos pusieron intermedios, otros se pusieron de lluvia extrema y otros medios, pero estos en las ultimas vueltas. Los neumáticos que mejor fueron durante toda la carrera al final fueron los de lluvia extrema. Tanta diferencia de ritmo de neumáticos había que uno de los factores por los que Xarpro quedó primero, fue por la elección de este neumático. Xarpro con neumáticos de lluvia extrema adelanto a Zelu que tenía neumáticos intermedios. Por otra parte hubo pilotos que para pasárselo bien se pusieron medios para probar.